Las nuevas tecnologías y el sueño de la casa inteligente

La opinión de Fernando Durán, Technological Development Manager - Supply Chain Manager en Cambre

La seguridad, economía, confort y sustentabilidad, son condiciones que los seres humanos buscamos para nuestro hábitat desde el comienzo de los tiempos. La investigación y el desarrollo tecnológico nos han permitido optimizar dichas condiciones, cada vez más. Los equipos y técnicas son cada vez más sofisticados y completos, permitiendo gestionar el funcionamiento de nuestros hogares estamos en ellos, o cuando debemos hacerlo en forma remota, desde cualquier parte del planeta.

Esta gestión puede incluir desde el control de la iluminación (como encendido, control de nivel, apagado, ambientaciones, creación y ejecución de escenarios, temporización de ejecución mediante eventos programados, simulación de presencia, etc) hasta el encendido y apagado de electrodomésticos en forma directa o programada. También la apertura, nivel y cierre de cortinas tipo “blackout”, en forma presencial, programada y/o remota. Existen infinitas posibilidades.

Estas tecnologías están adquiriendo cada vez mayor difusión, lo que permite hacerlas más accesibles. Por otro lado, ha disparado la aparición de múltiples opciones de automatización hogareña, en función de las necesidades de las personas que requieren cada vez más de una gestión racional de sus dispositivos y de los recursos energéticos que alimentan su hogar. Ante esta oferta de sistemas y equipos podemos hacer algunas consideraciones a tener en cuenta para definir el que más se adecue a nuestras necesidades y expectativas.

Hoy en día la mayoría de las tecnologías para automatización hogareña cuentan con la posibilidad de ser accionadas mediante aplicaciones diseñadas para dispositivos móviles, que pueden ser descargadas en las tiendas virtuales.

La gestión a través de estas aplicaciones tiene la ventaja de utilizar una metodología que hoy está ampliamente difundida entre nosotros. Es conveniente que los sistemas así definidos cuenten con capacidad multicliente ya que permitirá a varios usuarios acceder y operar sus dispositivos en forma simultánea.

También es conveniente que la estructura de comunicaciones de la aplicación “domótica” (domus: del latín, casa, tica: del griego, automática) esté basada en algún protocolo internacional diseñado de forma tal que permita una gestión automática de las comunicaciones entre los elementos del sistema. Estos protocolos aseguran la formación de redes dinámicas, comunicaciones seguras con aviso de recepción de mensajes y confirmación de ejecución, elección de las rutas de comunicación más efectivas, reemplazo de rutas en caso de problemas en alguno de los nodos. Tal es así, que en estas redes, cada módulo cuenta con un número de serie único que lo identifica dentro de la misma, evitándose así el ingreso de dispositivos ajenos a la red y la posibilidad de accesos externos no deseados.

La ventaja que poseen los sistemas totalmente inalámbricos, basados en radiofrecuencia, es que no se necesita realizar obra civil alguna (rotura de paredes, pasaje de caños independientes a los de tensión, revoques, pintura, etc.), ya que la unidad central de proceso (UCP) y los módulos que integran la red, se comunican entre sí mediante radiofrecuencia utilizando el protocolo descripto anteriormente.

Otra ventaja que tienen los sistemas para domótica que utilizan radiofrecuencia es que son escalables. Se puede comenzar automatizando algunos artefactos para ir agregando luego otros módulos a la red a medida que se presentan nuevas necesidades.
Otro factor a tener en cuenta es la estrategia de funcionamiento del sistema de automatización. La más recomendable es aquella estrategia que está basada en el armado, interconexión y funcionamiento local de la red, esto significa que el funcionamiento de ésta y del sistema en general es independiente de la existencia de conexión a internet. Mediante un router WiFi y la utilización de algún dispositivo móvil, se puede gestionar el hogar sin necesidad de contar con servicio de internet. Para estos tipos de sistema la falta de internet NO IMPIDE el normal funcionamiento del hogar, sólo limita la posibilidad de acceso remoto desde el exterior.

Algunos sistemas ofrecen la actualización continua de los contenidos e innovaciones agregadas al sistema. Estas tecnologías están en crecimiento permanente y se nutren de las continuas experiencias de los usuarios y de la incorporación de nuevas funcionalidades.

Por ello es recomendable elegir un sistema actualizable por el proveedor vía internet. Es conveniente que la actualización del software de aplicación, permita también la actualización de los nodos que integran la red. Hay sistemas que están programados para que, una vez recibido nuevo software en la unidad central de proceso (UCP), ésta realice un proceso de actualización de los nodos de la red.

Es muy útil contar con la posibilidad de operación dual de los dispositivos que integran la red domótica. Esto implica que los módulos de encendido/apagado y control de iluminación (“dimers”) pueden ser instalados de la misma forma y en el mismo bastidor que un interruptor tradicional.

Esta característica dual de los módulos accionados desde sus frentes, permite que las personas que no están habituadas al uso de estos sistemas, puedan seguir accionando los dispositivos en forma manual desde los lugares en que siempre lo han hecho, agregando infinidad de posibilidades al incorporar dichos dispositivos al accionamiento y programación vía la aplicación domótica.

(*) Fernando Durán: Technological Development Manager - Supply Chain Manager en Cambre