Gripe A, un antes y un después en el Teletrabajo

Debido a la emergencia sanitaria en Argentina, el teletrabajo creció a pasos agigantados en menos de un mes. La Licenciada Sonia Boiarov explica el impacto en las empresas

Debido a la Gripe A es muy probable que usted, como tantas otras personas, haya pensado en teletrabajar, o de hecho ya lo esté haciendo. En muy poco tiempo esta modalidad ocupa un nuevo rol en la sociedad, que sin dudas seguirá echando raíces con el tiempo. Canal AR entrevistó a Sonia Boiarov, fundadora del Centro de Teletrabajo y Teleformación de la Facultad de Ciencias Sociales (UBA) y presidenta de la Comisión TIC de USUARIA.

- ¿Cómo evaluá el impacto que tuvo la Gripe A en el teletrabajo en Argentina?

- El mayor impacto lo ha tenido en las empresas. Muchas comenzaron a instrumentar programas de teletrabajo o a intensificar los que ya tenían. Políticas que tienden más a mantener sus puestos que a crear nuevos. Esta es otra de las posibilidades que ofrece el teletrabajo ante las dos coyunturas principales que vivimos: Crisis y Gripe A. En el caso de la crisis permite reducir costos de estructura, y en el de la Gripe A simplemente ayuda a atender la emergencia sanitaria tratando de evitar grupos numerosos de personas compartiendo un mismo lugar. Todo ello, a pesar de que la Ley tiene media sanción en diputados y aún no tengo novedades del curso que ha tomado en el Senado. Pero el teletrabajo es trabajo, se rige por las leyes laborales vigentes.

- ¿Cree que esta situación se convertirá en un antes y un después para el desarrollo del Teletrabajo?

- Definitivamente sí. Son muchos años que ya se habla de teletrabajo en nuestro país. Son muchas más las personas, empresarios y funcionarios que hoy se suman al teletrabajo. Esta modalidad creció mucho más rápido que en otros países -incluso comparando con los desarrollados. Por otro lado, destaco cómo los colegios respondieron rápidamente ante la amenaza de la Gripe A. Muchos de ellos al armar aulas virtuales y enviar a los alumnos a estudiar a sus casas, están fortaleciendo la nueva generación de trabajadores del conocimiento. Estos niños utilizarán las tecnologías en sus futuros trabajos y no tendrán la rigidez obligatoria de trasladarse a un determinado espacio, ni siquiera de tener que cumplir un horario fijo predeterminado, siempre que la tarea lo permita.

- ¿Qué motivos impulsaron originalmente el teletrabajo en el país?

- El teletrabajo tuvo una fuerte evolución en Argentina que vale la pena recordar. Cuando fundamos el Centro de Teletrabajo y Teleformación en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, en el año 2000 el impacto del teletrabajo se vio más en la gente que perdía su trabajo y que pensaba en el teletrabajo como una nueva oportunidad de trabajo independiente. Ante la falta de oportunidades locales, se convirtieron en exportadores, como vimos en la investigación Etis-lac que hicimos con el IDRC y la Comisión TIC de USUARIA (www.etis-lac.org.ar). Luego de unos años nos ocupamos de darle una mayor importancia a nivel gubernamental: participamos en la primera fase de la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información y apoyamos a la embajadora Ileana Di Giován con los documentos de Argentina, para que apareciera el teletrabajo en los principios de la SI que se fijaron en el año 2003. En la segunda fase acercamos al Ministerio de Trabajo a la Cancillería y colaboramos más desde la Comisión de Teletrabajo. Hoy el foco de nuestro trabajo está puesto en producir resultados. Para ello, estamos trabajando desde la Comisión TIC de USUARIA en la inserción de las personas con discapacidad a través del teletrabajo, afianzando los temas de educación, ayudando a las empresas que quieren implementar programas serios de teletrabajo con Red Experta, colaborando a nivel regional en la definición de políticas públicas, y organizando el Evento Académico Internacional Telework 2010: 15th Workshop ITA-International Telework Academy, que por primera vez se realizará en nuestro país.

- ¿Cuáles son hoy las principales barreras del crecimiento del teletrabajo en el país?

- El acceso a las TICs. Creo que debe extenderse de forma más equitativa. Para hablar de un fenómeno federal –no sólo urbano como es hoy- hay que solucionar las asimetrías tecnológicas. En el plano educativo, hay que informar aún más y modificar las currículas formativas proveyendo de las herramientas que necesitarán en el trabajo de la Sociedad de la Información. Además, sería importante evitar la improvisación en la implementación del teletrabajo. No se trata de darle una notebook a un empleado y decirle que desde mañana trabaje desde su casa. Por último, queda el cambio cultural, que durará pocos años. Las nuevas generaciones ya traerán el teletrabajo bajo el brazo. Para ellos, trabajar a distancia será una posibilidad que tomarán o dejarán como algo más de cualquier trabajo.


Más información: www.telework2010.tic.org.ar.