El aumento impositivo a productos electrónicos, bajo la lupa
11 de Agosto de 2009La consultora Carrier y Asociados evaluó los puntos positivos y negativos de la norma que avanza en el Congreso. Avaló la exclusión de las notebooks, aunque demandó que los celulares también sean borrados del listado
El avance del denominado “impuestazo” tecnológico en el Congreso, ya obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados, movió las aguas dentro de la industria de hardware. Mientras las cámaras que representan a fabricantes, ensambladores e integradores del continente mostraron su férrea oposición al proyecto impulsado por el Poder Ejecutivo Nacional, desde Tierra del Fuego –principal beneficiaria de la iniciativa- salieron en su defensa.
De un lado, sostienen que de aprobarse, pondrá en peligro miles de puestos de trabajo y encarecerá los equipos, mientras que funcionarios y empresarios de la isla afirman que revitalizará la producción local, bajará las importaciones y alentará las inversiones.
Por esa razón, cabe resaltar el trabajo de la consultora Carrier y Asociados, que analizó los puntos a favor y en contra de la propuesta. En un artículo titulado “Avanza la gripe F (Fiscal)", destacó como un signo positivo que fueron eliminadas las notebooks del listados de bienes suntuarios. “Más allá de las posturas ideológicas en relación al proteccionismo o librecambismo, la inclusión de las portátiles no tenía gollete, habida cuenta de que las mismas se fabrican en el territorio nacional. De haber prosperado el proyecto original, se hubiera discriminado entre la producción nacional y de Tierra del Fuego, lo que a todas luces era un disparate”, agregó.
Sin embargo, sostuvo que la iniciativa debería ser mejorada, excluyendo también a los teléfonos celulares, porque son una clase de equipos que ayudan a reducir la brecha digital, además de ser una herramienta de trabajo para mucha gente que pertenece a los segmentos económicos más bajos. “La imagen del celular asociada al empresario hiperactivo es cosa del pasado”.
La consultora remarcó que en un año donde la caída de la importación de esta clase de dispositivos fue del orden del 27%, un aumento impositivo sólo puede conducir a empeorar la situación. “Así tendremos menos renovación, menos usos de nuevos servicios (viables a través de equipos más avanzados) y menos recaudación de impuestos”.
Agente democratizador
Al tratar el tema del IVA, que pasará del 10,5% al 21%, evaluó que era una medida “acertada”, en relación a la igualdad fiscal que promovería. “En realidad, el problema aquí es lo elevado del IVA, no su aplicación a los electrónicos. Sin embargo, sería bueno evitar sobresaltos estableciendo un cronograma de suba progresiva. Aunque pedirle esto a un gobierno que aumenta un 300% el gas de una facturación a otra es algo ingenuo”.
Por otro lado, Carrier evaluó el impacto será casi neutro en el caso de los televisores de LCD, ya que las retenciones actuales en la Aduana llevaron a que prácticamente no se acceda a aquellos fabricados fuera del país. Situación muy distinta a la de equipos más pequeños, como cámaras fotográficas y GPS. “Al haber un margen de precio tan grande, se incentiva el contrabando”.
A modo de conclusión, la consultora afirmó que “más allá de las críticas o apoyos” que recibió el proyecto, es indudable que detrás de la medida hay un interés recaudatorio. Citando datos del El Cronista, manifestó que el Gobierno Nacional espera recaudar 3.000 millones de pesos, “lo que le permitiría tapar algunos baches fiscales”.
Más información: www.carrieryasoc.com.
