Las cooperativas competirán contra CTI, Personal y Movistar

Por Sebastián Premici
El mercado de la telefonía celular está a punto de cambiar. Si bien las tres grandes operadoras (CTI, Personal y Movistar) quieren que todo siga igual, es decir, que no se incorpore ningún otro jugar, el Estado y las empresas cooperativas quieren participar ya. De hecho, Comarcoop, empresa que nuclea a las telefónicas del interior del país, está lista para salir a competir con la ayuda de la actual administración pública. En la segunda jornada del Congreso organizado por Convergencia, se presentaron Guillermo Moreno, secretario de comunicaciones de la Nación; y Antonio Roncoroni, presidente de Fecosur (una de las cooperativas que forma parte de Comarcoop), quienes ofrecieron a los participantes la visión política y estratégica de las Telecomunicaciones para el Estado. "La brecha digital no se achica vendiendo celulares. Se achica aprehendiendo y aprendiendo la tecnología. Por eso queremos participar en la oferta global de tecnología", aseveró Moreno

CTI, Personal y Movistar son los dueños de un negocio que mueve millones de dólares. ¿Cuál es el límite para el crecimiento? ¿Serán los celulares una respuesta a la brecha digital? Las tres empresas que manejan el mercado no quieren que nazca un nuevo competidor; ¿podrá el Estado entrometerse en esta disputa? Las empresas cooperativas de telefonía y el secretario de comunicaciones de la Nación, Guillermo Moreno, no se quedaron callados y les respondieron a los tres grandes operadores. "Comarcoop representa para el Estado la recuperación de la línea de bandera en el plano de las telecomunicaciones", dijo Antonio Roncoroni, presidente de Fecosur. Así comenzó la segunda jornada del Congreso organizado por Convergencia denominado La revolución móvil 2005?

Quizás hubiera sido interesante armar una sola mesa de debate, que incluya al mismo tiempo a CTI, Personal, Movistar, las Cooperativas y la Secretaría de Comunicaciones. Todos juntos, para lograr que las discusiones sean más directas. Pero no fue así, primero se presentaron las tres grandes empresas y luego el Estado y el presidente de Fecosur, Antonio Roncoroni. El Estado por un lado y las empresas multinacionales por el otro. Pero el diálogo estuvo, o mejor dicho, tanto Moreno como Roncoroni se encargaron de contestarle a las empresas que lideran el mercado de telefonía celular en el país y la región.

Los dichos

Antonio Roncoroni, presidente de Fecosur, hizo hincapié en el proceso histórico de cooperativismo, en donde identificó cuatro etapas:

  • La primera (1960) la caracterizó como fundacional. Era la época cuando existían ciudades del interior en donde el Estado y las empresas no prestaban servicios. Recién en 1963, el Estado le otorgó a las cooperativas una Licencia Precaria de Comunicaciones.
  • La segunda etapa se denomina de transición (1980-1990). "Las empresas cooperativas prestábamos bien nuestros servicios; el Estado se había convertido en una institución pasiva para cobrarnos, hecho que nos permitió crear nuestras redes", comentó el presidente de Fecosur.
  • La tercera etapa fue de subsistencia: es la etapa de la privatización de ENTEL. "Cuando se privatizó la empresa pública de telecomunicaciones nos prometieron el 5 % del patrimonio. Ese porcentaje nunca fue entregado por las dos empresas que resultaron de la privatización. Telecom y Telefónica no cumplieron la ley", agregó Roncoroni.
  • A partir de esta iniciativa, la empresa formada por las cooperativas y que dentro de 60 días dará a conocer gran parte de su plan de negocio, representa para el Estado la recuperación de la línea de bandera en el plano de las telecomunicaciones. Esta sería la cuarta etapa, el momento de la consolidación


  • Por su parte, Guillermo Moreno, secretario de comunicaciones de la Nación, arrancó su exposición haciendo referencia a los diarios de hoy. "El tema sustantivo de este evento, según publicaron algunos medios de comunicación, es si el subsidio de los terminales correspondía o no correspondía. Si planteamos la discusión en estos términos, estamos en problemas", aseveró el Secretario. Y continuó marcando las responsabilidades del sector privado en el desarrollo del mercado de las telecomunicaciones, una retórica muy a tono con las practicadas por el presidente de la Nación, Néstor Kirchner. “Es muy difícil que podamos sostener una tasa de crecimiento importante en el marco de un sistema capitalista si las mejores cabezas no están al mando de las empresas. Así como desde el Estado adoptamos políticas incorrectas, también tenemos que lidiar con una coyuntura económica adversa. Pero a pesar de la adversidad, los anticuerpos reaccionaron, se prendieron algunas luces, actuamos como colectivo social y avanzamos sobre la economía. Este era nuestro problema. Del otro lado, había que ver si la dirigencia empresarial estaba a la altura de las circunstancias. En un sistema capitalista, la única manera que tenemos para bajar la tasa de desocupación es tener empresas eficientes, eficaces, competitivas e insertas también en este colectivo social para que puedan detectar con precisión cuál es el proyecto que la sociedad argentina está consensuando".

    De esta manera, la Secretaría de Comunicaciones salió a responderle a las tres grandes empresas de celulares. El apoyo del Estado a Comarcoop está en sintonía con el apoyo hacia otras empresas nacionales - estatales como Ar Sat y Enarsa. Esta nueva empresa, producto de la unión de las cooperativas, tiene por objeto generar los nichos de demanda que les permita saber que sus procesos de investigación y desarrollo tienen un lugar en la producción del país. En este contexto, Moreno explicitó: "Creo que la brecha digital no se achica vendiendo celulares. Se achica aprehendiendo y aprendiendo la tecnología. Por eso queremos participar en la oferta global de tecnología; queremos que algunos componentes de los terminales se fabriquen en el país (por ejemplo, las baterías). Tenemos que generar la masa crítica de demanda", finalizó.