La nueva estrategia de Negroponte para OLPC

Las OX no costarán 100, sino 175 dólares debido a modificaciones sustanciales en el hardware y a la reducción de unidades. Se producirían 3 millones de laptops a diferencia de las 7 millones que habían previsto inicialmente y podrían traer Windows de fábrica, lo que generó resentimiento en la comunidad de Software Libre.

Hace unos días, en las oficinas centrales de One Laptop Per Child (OLPC) en Boston, Nicholas Negroponte, líder del proyecto informático-educativo, se reunió con un selecto grupo de analistas financieros y periodistas especializados para comunicarles la nueva estrategia de OLPC. Luego de tres horas donde se trataron temas relacionados a la viabilidad del proyecto y sus intenciones, salieron a la luz los nuevos lineamientos del proyecto, que sacudieron al entorno.

En primer lugar, Negroponte aseguró que las OX podrían venir con Windows de fábrica, como con cualquier distribución local de Linux, o bien se podría instalar Windows localmente, desinstalando previamente el SO Sugar/Linux. En cuanto al precio, de los 100 dólares estipulados inicialmente, la laptop costará 175 dólares debido a cambios en el hardware y a la reducción de fabricación de unidades, que serían 3 millones en lugar de las 7 millones anticipadas. Por último, Negroponte vio con buenos ojos la posibilidad de probar el dispositivo en EE.UU., país que en un principio no entraba dentro de las naciones que se iban a beneficiar con el proyecto.

Este viraje de estrategia, sobre todo el relacionado al sistema operativo, causó malestar en la comunidad de software libre, que en parte había embanderado su causa detrás del proyecto. De esta manera, consideran que el cambio resulta un abandono a los supuestos básicos de OLPC, cuestión que puede generar cierta controversia, teniendo en cuenta que desde sus inicios, OLPC no se presentó como una campaña de promoción de software libre sino como un proyecto educativo para países emergentes. Así lo manifestó Alejandro Piscitelli en educ.ar, el portal educativo del Estado, donde se desempeña como director ejecutivo.

En lo referido al precio de las OX, que ascendió a 175 dólares, muchos oportunistas pusieron en duda el carácter no lucrativo del proyecto sin tener en cuenta un factor vital. A fines de marzo, el hardware de las OX fue modificado para igualar a la Classmate de Intel. Su anterior procesador de 128MB DDR-RAM que corría a 266MHz se reemplazó por uno nuevo de 256MB DDR-RAM a 333MHz, y su nueva memoria flash de 1GB duplica a la versión previa. Estos cambios permitirán que los dos programas más exigentes de la OX, la cámara de video y el programa TamTam para hacer música, logren una mejor performance. Y, por sobre todas las cosas, esta nueva configuración permite que las OX corran, si se quiere, con Windows XP.

Estas dos aristas (el cambio de hardware y la intención de incorporar a Windows en la laptop) permiten la entrada de un nuevo factor: la estrategia de Microsoft de vender un paquete educativo a sólo 3 dólares a todos aquellos gobiernos que decidan comprar PCs para sus alumnos (ver nota). Este paquete tecnológico ya está integrado en las Classmate de Intel.

En tren de opiniones, Luis Ramírez, director del Programa para el Estudio de la Sociedad de la Información en Chile e impulsor del proyecto OLPC en ese país, aseguró en su blog que la movida de Microsoft sería un elemento negativo para el proyecto OLPC si por ejemplo:

  • Se impidiera a los usuarios finales reemplazar el sistema operativo de Microsoft por cualquier otra opción.
  • Si el acuerdo de los 3 dólares tuviera fecha de expiración.
  • Si el producto entregado por Microsoft fuera inferior al estándar del mercado y obligara a los usuarios finales a adquirir productos para compensar esas falencias.
  • Si, como consecuencia de correr Windows no se pudiera ejecutar la mayoría de las grandes prestaciones que hacen distintivo el proyecto liderado por Negroponte (ej, la red Mesh).


  • Según el profesional chileno, nada de eso ocurre por ahora y asimismo aseguró: "Si la máquina XO puede correr más programas y desde luego, tiene la posibilidad de funcionar bajo distintos sistemas operativos, entonces en la práctica me parece que el proyecto se hace más atractivo y no todo lo contrario. Los detractores más acérrimos de Microsoft deberían distinguir entre lo que son sus propias preferencias y opiniones sobre el software y lo que podría permitir la masificación del uso de las herramientas computacionales para los niños".