La Justicia le dio la derecha a la portabilidad numérica

Los usuarios de telefonía celular en Argentina podrán mantener su número aunque cambien de compañía, de acuerdo a un fallo judicial que obliga al Gobierno a poner en práctica la portabilidad numérica. En realidad, se trata de algo reglamentado hace 9 años, pero que nunca se aplicó.

Esteban Russell

Según informó diario Perfil, el juez Enrique Lavié Pico, titular del Juzgado Contencioso Administrativo Federal Nº 6, dictó un fallo que ordena al Estado Nacional a reglamentar la portabilidad numérica. La norma deberá implementarse en los próximos 90 días a través de la Secretaría de Comunicaciones, que depende del Ministerio de Planificación Federal manejado por Julio De Vido.

Consultado por Canal AR Esteban Russell, , abogado especialista en telecomunicaciones y ex Gerente de Marco Regulatorio de Movistar, consideró que el fallo representa un avance muy importante. “Permitirá que la pérdida del número no sea una barrera para cambiar de prestador, en caso de que el usuario esté disconforme con el servicio o con el precio de la compañía”.

Además estimó que las empresas, a fin de no perder clientes, podrían verse obligadas no sólo a revisar sus precios, sino también a mejorar la atención al público en sus locales y call centers. “Ahora los clientes podrán amenazarlos con que ´si no me solucionan el problema, me voy de la compañía´. Hoy en día, la amenaza es: ´Si no me solucionan el problema, doy de baja mi servicio”.

Desde el punto de vista del abogado, otro beneficio radicaría en que se abre la cancha a nuevos jugadores interesados en ser prestadores móviles, que ya no encontrarán la barrera de entrada de que debían convencer a los usuarios a cambiar su número, en caso de irse a otra empresa. “En cambio, si saben que sus potenciales clientes no pierden el número si optan por su servicio, estarán más dispuestos a invertir y meterse en el negocio”.

Algunos precedentes

Sin embargo, Russell advirtió que no todas las experiencias de la portabilidad numérica fueron exitosas. Por ejemplo, la Comunidad Europea hace unos años señaló que la tasa de números cambiados era tan sólo el 3%. “Esto podría basarse en que la pérdida del número no sea tan gravosa, ya que hoy con un mail y SMS a todos los contactos, el problema se soluciona”.

El éxito del sistema dependerá en gran medida del precio del trámite de portación del número. “Si el costo es alto, fracasará. Por ello, debería irse a un esquema en el que, si hubiera un precio, el operador cubra con él sólo sus costos”.

- ¿Qué otras cuestiones quedan por solucionar en el terreno de la telefonía celular?

“Lo principal es la claridad en los precios. Como están desregulados, hay una anarquía total. Esto es bueno en algún aspecto, como la flexibilidad para customizarlos y realizar promociones, pero no en otros. Por ejemplo, hay precios subdivididos en hora pico, hora no pico, sábados y domingos, etcétera. Y esto se agrava en los planes con tarjeta porque el cliente no recibe factura y no puede ver cómo, qué y cuánto se le cobra.

“Otro asunto es la cobertura de la red. Hoy el celular es el teléfono de todos: de los ricos y de los pobres. En donde viven los ricos difícilmente haya cobertura deficiente, pero en donde viven los pobres, que a veces ni tienen una línea fija, la cobertura tiene que ser mejorada donde está y tiene que llegar a donde no está”, concluyó.