A través de una movilización nacional la comunidad científica denunció un cientificidio

Bajo el lema "Una nieve tóxica está destruyendo la ciencia argentina", miles de investigadoras e investigadores, estudiantes, personal nodocente y docente de la ciencia salieron a las calles la semana pasada para denunciar el desfinanciamiento que atraviesa el sistema científico-tecnológico nacional. Vestidos como el icónico personaje de El Eternauta, símbolo de la amenaza constante y silenciosa que se cierne sobre el sector, los manifestantes marcharon hacia el Polo Científico Tecnológico en Palermo, con movilizaciones simultáneas en veinte ciudades emblemáticas del país.

La convocatoria, impulsada por la Red de Autoridades de Institutos de Ciencia y Tecnología (RAICyT), la Mesa Federal de Ciencia y Tecnología, ATE CONICET e ingresantes a la carrera del CONICET, visibilizó un "ahogo financiero sin precedentes desde la vuelta a la democracia". La situación actual es crítica, y la inversión en ciencia y tecnología para 2025 se proyecta como la más baja de toda la serie histórica en relación con el PBI, perforando incluso el mínimo alcanzado durante la grave crisis de 2002.


Foto: https://exactas.uba.ar/

El plan de ajuste gubernamental ha provocado una brusca caída del 30% en 2024, sumándose a un nuevo desplome del 22% en el primer trimestre de 2025. Esto significa un retroceso acumulado del 46.5% real en solo dos años, y una disminución de más de 54 puntos porcentuales respecto del pico máximo de 2015. El impacto es transversal, afectando a todos los organismos y universidades nacionales. Organismos clave como la Agencia I+D+i han sufrido una caída del 78.5% en sus recursos, el CONICET y el INTA han visto un desplome real cercano al 36%, y la inversión en desarrollo de CyT en Universidades Nacionales ha caído un 79.1%.

Durante el acto central, Valeria Levi, vicedecana de la Facultad de Exactas de la UBA, fue una de las primeras oradoras en tomar la palabra, afirmando que "estamos viviendo una nevada mortal que está causando un cientificidio". Alertó que el recorte es tan salvaje que los científicos ya están renunciando a sus cargos debido a los bajos salarios. De hecho, los salarios reales de investigadores y docentes se encuentran en "caída libre", con los ingresos del personal del CONICET y las becas perdiendo 33.8 puntos reales en los últimos 16 meses, y los salarios docentes y de investigadores en universidades nacionales reduciéndose un 27.8% desde noviembre de 2023 y desplomándose un 38.0% desde el pico de 2011, ubicándose por debajo del nivel de 2002.


Foto: https://exactas.uba.ar/

Por su parte, el decano Guillermo Durán expresó que "Desde Exactas acompañamos este reclamo y reafirmamos que la ciencia es una herramienta fundamental para construir un país más justo, soberano y sustentable". Y subrayó que "en tiempos de crisis, defender la ciencia es defender el futuro".

La movilización, que duró dos horas, incluyó la lectura de un comunicado explicando los motivos del reclamo, intervenciones artísticas con bandoneón y coplas, y un coro que entonó el himno nacional. Lo más destacado fue la fuerte presencia de otros actores sociales que se sumaron al reclamo, incluyendo dirigentes políticos, centros de estudiantes, trabajadores del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) y Parques Nacionales, becarios de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación, asambleas de residentes hospitalarios y representantes de jubilados.

La consigna de la movilización, inspirada en la historieta de Oesterheld y Solano López, fue "La brújula anda bien, lo que se rompió es el mundo". Esta frase, junto a la poderosa afirmación "nadie se salva solo", encapsula la urgencia de un reclamo que trasciende el ámbito científico, buscando que el Estado garantice el desarrollo científico como una política pública esencial para el futuro de la nación.