¿Cuál es el panorama del consumo de software legal en Argentina?

Antonio Millé, vocero de Business Software Alliance, afirmó que los hogares, PyMEs y locutorios recurren en gran medida a programas "piratas", pese a que hay muchas opciones de fuente abierta

El consumo de software legal en Argentina se caracteriza por una alta informalidad, sobre todo en el mercado hogareño, en PyMEs y locutorios. Pero no es una cuestión única y privativa de nuestro país, sino que forma parte de un fenómeno cultural que se reproduce en todo mundo, según expresó a Canal AR Antonio Millé, vocero de Business Software Alliance (BSA).

Según Millé, las PyMEs no están dispuestas a pagar programas legales

Basándose en datos de la consultora IDC, que midió estadísticamente la cantidad de licencias adquiridas por cada PC comercializada en el mercado argentino, Millé afirmó que solamente el 25% de los equipos incorporados cuentan con una licencia oficial. El resto opera con programas "piratas".

Dividido por nichos

Sin embargo, aclaró que al referirse a las violaciones a la propiedad intelectual es necesario hacer una diferenciación por sectores: "No es lo mismo el mercado hogareño que el de oficinas, o el de PyMEs y compañías grandes, etc".

En los hogares, que desde su punto de vista están en "constante expansión" porque son importantes consumidores de computadoras, tiene una alta tasa de informalidad, algo que sucede también con las descargas de música y películas. La situación empeora en las terminales ajenas (locutorios), mayormente utilizadas por usuarios de menor edad, donde "la piratería es casi del 100%".

Las PyMEs tampoco presentan un panorama favorable para el software legal, y la única excepción serían las grandes compañías, porque cada vez siguen normas de calidad más exigentes.

La Ley es inocente

El vocero de BSA desligó de toda responsabilidad a la legislación de propiedad intelectual y derechos de autor: "Es excelente, pionera en los países americanos y sudamericanos. Si algo no falta, es legislación". Al momento de encontrar un culpable, no dudó en señalar que es un problema cultural que afecta al mundo entero. "La persona a la que le parece una vergüenza que el hijo le afane al frutero del barrio, no ve mal que le quite una canción a Mercedes Sosa o un programa de computación a TANGO. Pareciera que como no se toca con la mano, es de todos".

- ¿A las PyMEs, que cuentan con un margen de inversión limitado, les puede representar un obstáculo el costo de incorporar software legal?

- Si uno quiere una corbata de seda fina, hay pocas opciones. Si se busca software, hay una gran cantidad de opciones, empezando por las gratuitas. Hay muchísimo software de fuente abierta que se puede usar sin ningún tipo de gasto. El tema es que quieren Office o Windows de arriba, al tiempo que también quieren un software de Micorosoft y Corel, y no están dispuestos a pagar por ninguno. No es un problema de costos.


Más información: www.bsa.org.