OLPC: laptops baratas por un nuevo paradigma educativo
Por Darío Drucaroff 5 de Julio de 2006En una entrevista con Canal AR David Cavallo, científico investigador del laboratorio de medios del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y asesor del proyecto One Laptop per Child (OLPC), comentó cuál sería el impacto de la iniciativa liderada por Nicholas Negroponte en países como el nuestro. La clave parece estar en que "los chicos realmente se conviertan en creadores con la computadora"
Mientras el Gobierno propone discutir en las aulas una nueva ley de educación, debido a que la educación, la cultura, la ciencia y la tecnología jugarán un papel determinante en el futuro de la Argentina, el proyecto One Laptop per Child (OLPC) echa raíces en el país con la visión de cambiar el paradigma educativo.
Aprovechando su visita a la Argentina, Canal AR entrevistó en exclusiva a David Cavallo, científico investigador del laboratorio de medios del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y asesor de OLPC, con foco en el diseño e implementación de nuevos ambientes de aprendizaje y en el diseño de nuevas tecnologías que cambiarán la forma en la que pensamos la educación y la escuela.
- ¿Podrías comentarnos cómo está evolucionando el proyecto OLPC?
- OLPC está evolucionando de manera muy rápida. Técnicamente ha tenido un gran progreso, así que gran parte del foco actual está puesto en el desarrollo del software y de los contenidos, como también en pensar el potencial y el progreso que pueda darse a través de este proyecto. Creo que el acceso a una gran cantidad de computadoras puede cambiar radicalmente la educación, pero para esto se requiere un gran esfuerzo colaborativo. Por eso estar en contacto con Educar es extremadamente importante, por las contribuciones que obtenemos desde aquí tanto como desde Brasil y los demás países que están participando.
- ¿Quién está desarrollando el software para las laptops?
- Se trata de un proceso muy distribuido. Nosotros no tenemos el derecho de decirle a un país qué software debe usar, o qué contenidos, por eso cada país debe evaluar qué aplicaciones y contenidos usar. Pero algo bueno es que ya hay gente trabajando en todo el mundo, y como hay varios países involucrados con OLPC no todos deben hacer todo, cuando pueden beneficiarse trabajando en conjunto.
- ¿Existen posibilidades de que se desarrolle software en Argentina para el proyecto?
- Absolutamente. No es nuestro rol decidir si los desarrolladores de software podrán participar de la estructura del plan en el país, pero el potencial mercado para ellos de generar los contenidos es mucho más grande. Con la gran cantidad de laptops los estudiantes tendrán acceso a la computación no sólo por 15 minutos a la semana, sino por un largo período de tiempo, crearán su propio espacio, y hay una tremenda oportunidad para los desarrolladores de software y contenidos.
- ¿Cuál es tu rol en este proyecto?
- Somos una organización muy chica, así que cada uno de nosotros tenemos varios roles. Me mudé la semana pasada a esta región para ayudar a coordinar el proyecto con Argentina y con Brasil. Mi foco en investigación está puesto en las tecnologías y el aprendizaje, y este es principalmente el punto en el que estoy colaborando y participando.
- ¿Cuál es el estado de la negociación con los países participantes, y puntualmente con Argentina?
- Aún no hay un contrato firmado entre OLPC y los países involucrados, y todavía no lo hemos pedido. Queremos asegurarnos primero las mejores formas para el proyecto. La idea de OLPC todavía está en evaluación, así que aún no hay un contrato formal firmado. Nuestra esperanza es que el proyecto sea positivo para todos.
- En Brasil y Argentina la gran mayoría de las escuelas no están conectadas a Internet. ¿Cómo podrán interactuar las laptops entonces dentro de una escuela?
- Luego de estudiar el uso de las computadoras en los procesos educativos por más de 30 años, creemos que las PCs tienen un gran valor aún si no están conectadas entre sí. Sin embargo, cuando tenés conectividad, podés ayudar a los maestros a distancia, pero también podrían los estudiantes tener un espacio colaborativo con otras personas de su comunidad, de su país o del mundo. Así que la conectividad realmente trae otros beneficios. El diseño de estas laptops, con la idea de mesh network, permite que las máquinas mismas puedan proveer las bases de conectividad de una LAN (local area network). Así que con estas máquinas, y aún sin conectividad a Internet, se puede crear una LAN. También la idea de la laptop es que ayude a llevar la conectividad a los hogares también, de tal forma que el aprendizaje del alumno no se limite al horario de escuela. Hemos visto una tremenda diferencia entre las relaciones que mantienen los estudiantes con las computadoras de un laboratorio de computación en las escuelas por un lado y con las notebooks por el otro. Si en el laboratorio una PC se rompe, a nadie le importa. Además, el tiempo disponible es demasiado corto, y no sienten una fuerte conexión con la máquina. Con las laptops los mismos padres del estudiante quieren proteger las laptops para sus hijos. Esperamos que esta nueva experiencia genere un contacto único y un nuevo potencial para realmente mejorar la educación. Es por esto que hemos decidido trabajar inicialmente con países como Argentina y Brasil, por el alto nivel de capacidad técnica, por el alto nivel de capacidad de educación. Creemos que en estos países se instalarán las bases para mostrar las potencialidades de este tipo de aprendizaje.
- ¿Cómo resumirías los principales beneficios que brindaría a Argentina OLPC?
- Los beneficios potenciales son enormes. Algunas ciudades de Sudamérica han intentado poner un laboratorio de computación en las escuelas, y esto es extremadamente caro. En promedio son 10 computadoras por laboratorio (por escuela) y 43 chicos por clase. Los chicos pueden acceder al laboratorio una vez por semana y tienen un período de 15 minutos para trabajar sobre la computadora. A su vez, el costo de mantener miles de laboratorios es extremadamente alto, y todo por 15 minutos por semana por chico. Con un costo bastante alto se obtiene un beneficio bastante bajo. Entonces la gente dice: las computadoras para la educación no funcionan muy bien. Nosotros formulamos el problema de una manera muy distinta: los gastos son menos, porque reducimos los costos, y las chances de crecer en un período menor son mucho mayores. Porque se trata de lograr que quien use la computadora la tenga 24 horas al día. Creemos que este proceso continuará sobre sus propias bases a medida que la gente vea la importancia del acceso a las tecnologías en los procesos educativos. Pero no sólo navegando la Web o usando documentos de soluciones ofimáticas; los chicos realmente se convierten en creadores con la computadora. Y esto es algo muy importante a medida que continua cambiando la economía mundial. Esta es una parte fundamental de la inclusión económica y social. Soy muy optimista con respecto al potencial de cambio, pero creo también que es importante aclarar que esta transformación se va a dar de manera distinta en diferentes lugares del mundo, y también en las diferentes partes de cada país. Esto se dará si comparamos las áreas rurales de Argentina con la Ciudad de Buenos Aires, y ésta es una de las fortalezas de OLPC: no estamos tratando de implementar un plan centralizado, con una aproximación verticalista, y buscamos que agencias y grupos como Educar ayuden a implementar este tipo de desarrollos y modos de pensar la educación.
Más información: www.laptop.org.