Review de Red Faction: Guerrilla

Por Agustin Mendez - Colaborador de Alkon
Este título vuelve a situarse en Marte. Aunque no se destaca por su historia o dificultad, tiene otros atractivos que lo dejan bien parado, como la variedad de armas, los detalles de los vehículos y un destacado modo multiplayer

De la mano de THQ y Volition se viene la nueva entrega de una de las sagas más peculiares del mundo de los videojuegos. Así es Red Faction: Guerrilla nos devuelve a Marte luego de los sucesos de los primeros dos juegos, en donde liberamos a Marte de las garras de la corporación Ultor y logramos por fin darle fin a un capítulo muy negro de la historia de este planeta o eso creíamos… En el juego tomaremos el rol de Alec Mason, uno de los más recientes colonos del planeta mas rojo del sistema solar, Alec se encontrara con su hermano al cual no ve desde hace mucho tiempo. Ambos se dedicaran a la minería y a la extracción de chatarra que quedó hay en el planeta. Pero pronto Alec descubrirá que su hermano Dan es parte de algo mucho mayor y más peligroso. Esta es la premisa del Red Faction: Guerrilla, el juego de acción a el mejor estilo GTA, pero por supuesto situado en Marte.

¿Por qué y cómo peleamos?



Al poco tiempo de llegado Alec a Marte y empezando a trabajar con Dan, son atacados por el EDF (Earth Defense Force), los cuales tienen dominados con puño de hierro a todo Marte, ya que Dan es parte de un grupo llamado Red Faction, el cual desde hace mucho tiempo trata de lograr no sólo la liberación de Marte de las corporaciones, sino que también independizarse completamente de la Tierra y su avaricia por los abundantes recursos de este planeta. Luego de un tiroteo intenso Dan recibe muchas heridas y muere, dejando a Alec solo. Al volver a la casa de Dan, se encuentra con miembros del EDF que tratan de arrestarlo, pero no solo el se defiende, sino que también se le unirán muchos miembros del Red Faction para ayudarlo. Luego de la escaramuza, nos pedirán que nos unamos a ellos, y como ya la suerte está echada, nos uniremos a este mítico grupo de guerrilleros.

Lo que siempre definió a los juegos de Red Faction ha sido la capacidad que tiene el jugador sobre no solo estructuras, sino que también sobre el terreno. Me refiero por supuesto a la capacidad de destruir de una manera creíble y precisa a estas dos. Aunque en este juego lo del terreno es suprimido, sí podremos destruir como se nos plazca toda estructura que veamos. Marte se divide en 6 sectores y el primero que conoceremos es llamado Parker. El sector es nombrado luego del héroe del Red Faction I y II. En este sector se nos darán las primeras misiones y la información necesaria para aprender a pelear contra el EDF.



La manera de combatirlos no es nada más ni nada menos que la gracia más grande del juego: destruyendo todo a tu paso, ya sea con tu muy confiable martillo de minero, bombas, lanzamisiles, etc. De esta manera pelea la Red Faction, brutal y sin misericordia, es de esta manera que iremos destruyendo bases, torres de comunicación, plantas procesadoras, carteles con propaganda, etc. y de esta manera haremos que el EDF pierda control sobre los sectores. Además, deberemos completar misiones para la Red Faction, las cuales hacen mover la historia, las cuales son bastante buenas, aunque algunas son simples. También tendremos misiones extras, pero estas vienen más de la mano de conseguir chatarra, la cual sirve como un dinero en el juego. Estas misiones serán simples, como atacar a un objetivo o defender otro. También estarán las que son bastante más complicadas y pueden terminar exigiendo la perfección, como son las de destruir ciertas estructuras en un tiempo determinado y sentarnos en la torreta de un vehículo para generar una cierta cantidad de daño a las estructuras del EDF.

Las facciones de Marte

Como ya he dicho, hay dos facciones mayores, los Red Faction y los EDF. Ambas cuentan con un arsenal propio bastante grande y poderoso. Los EDF cuentan con las armas más básicas y otras no tan básicas, desde pistolas, escopetas, ametralladoras y una muy particular que dispara pequeños misiles que persiguen a los objetivos que hayan sido impactados anteriormente. También contarán con mucha cantidad de vehículos que van desde jeeps, transportes de tropas, estas dos con sus propias torretas para repartir dominación; tanques y vehículos aéreos. Los EDF son espectacularmente resistentes a casi cualquier arma y el problema mayor radica en su capacidad de encerrarnos rápidamente, y con su IA bastante buena, ya que se cubre cuando hay que cubrirse y nos rodean cuando pueden hace que sean enemigos a los cuales hay que respetar.

Derribando ilusiones

La Red Faction, en cambio, cuenta con no sólo las armas del EDF sino que también con armas propias que iremos consiguiendo a medida que recolectemos chatarra. Ésta última cuenta con un papel central en el juego, ya que no sólo mueve la historia en cierto punto sino que también nos es increíblemente útil. Al entregarla a los ingenieros del Red Faction, ellos nos harán nuevas y mejores armas. Con la chatarra podremos mejorar a nuestro personaje tanto como las armas. Es entonces que podremos generar armas como un simple lanzamisiles, armaduras para el personaje, mejoras al martillo, una muy poderosa lanza cuchillas, un arma al mejor estilo Star Wars en donde disparamos rayos que paralizan a nuestros oponentes y un arma muy especial llamada Nano Forge la cual al ser disparada libera nano maquinas que destruye todo lo que toca.
La Red Faction también cuenta con vehículos, pero son versiones de los vehículos de civiles con torretas soldadas. Aquí el juego también brilla, ya que hay trasnportes de todos los tamaños y clases: los hay del estilo buggy de arena, camionetas, camiones, y cuando llegamos a zonas como Eos o Oasis, las zonas más acaudaladas de Marte, veremos autos con diseños muy futuristas. La joya de los vehículos se encuentra en los Walkers, grandes robots para construcción que usaremos para el propósito inverso.

Por último, está la tercera facción del juego los Marauders. Aunque ciertamente no toman un papel central en el juego, sí lo hacen durante ciertas misiones y sobre el pasado de uno de los personajes principales. Ellos son salvajes carroñeros de chatarra y no se detendrán ante nada para eliminarte. Lo más interesante de ellos es el modelo de sus vehículos, que parecen sacados de la peor pesadilla de Mad Max. Son gigantescos vehículos que infunden terror sobre quien los vea, llenos de calaveras. Con tanto para ver y hacer, Marte nunca se vuelve aburrido durante las mas de 15hs de juego que tiene, sin contar misiones extras.



El planeta rojo en todo su esplendor

El diseño grafico del juego es simplemente espectacular, desde los escenarios enormes que se nos presentan desde el comienzo del juego hasta el diseño de autos y personajes. Lo que brilla ciertamente más que nada es el sistema de destrucción de estructuras, ya que el motor de físicas que usaron es excelente y perfecto. Esto se debe a que ninguna estructura se destruye de la misma manera que la siguiente, ya que fue programada para que cada parte de la estructura que caiga tenga una física propia. También algo que es bastante esplendoroso es la realización de las colonias y los habitantes de las mismas. En primer lugar, no hay muchos asentamientos, aunque se puede explicar ya que hace poco que se empezó a formar el planeta, y la otra es escuchar hablar a los colonos. Estas cualidades le dan al juego un toque realista muy bueno y bien desarrollado.

En cuanto a la parte de sonido es genial. El golpeteo feroz de nuestro martillo, las explosiones de un tanque de lo que seria gasolina, al derribarse un edificio y escuchar los hierros retorcidos caer… simplemente soberbio.



El juego, en cuanto a voces, es bastante bueno, desde los personajes principales de la historia, pasando por algún colono que nos encontremos por el camino, miembros del EDF diciéndonos que nos vayamos del lugar o los del Red Faction diciéndonos alguna palabra de aliento y la radio una de las cualidades mejor recibidas del juego en la cual se hablara no solo de las acciones que toma el Red Faction; sino también de las misiones secundarias, por supuesto esta radio es controlada por el EDF lo cual la hace mas graciosa ya que distorsiona la realidad de los que nosotros acabamos de hacer.
En si, el juego tanto grafica como en audio son un esplendor absoluto. El único problema es en el requerimiento de máquina para correr el juego y como los escenarios parecerían estar vacíos, ya que casi siempre estamos viendo una montaña o sólo arena roja, hasta que encontramos algún asentamiento.

Destruyamos juntos

En lo que al multiplayer se refiere, no es más que impresionante el trabajo realizado por lo muchachos de Volition, ya que el sistema de destrucción de estructuras es traspasado a el multiplayer. Es así que deberemos aportar nuevas estrategias a las partidas con nuestros amigos. Los modos son los simples Deathmatch, todos contra todos, Capture the Flag, captura la bandera y Team Deathmatch, equipo contra equipo.



Pero hay tres modos más que son únicos para el Red Faction Guerrilla. Estos son Siege, en el cual dos equipos pelean para ver quien hace mas daño a las estructuras del mapa, Destroyer, en el cual un miembro del equipo es seleccionado como el que tiene la habilidad para destruir estructuras, deberemos protegerlo y ayudarlo para ganar la partida destruyendo todo lo que pueda. El ultimo y el que trae una novedad sobre el sistema de juego es el Damage control, en cual hay tres estructuras las cuales deberemos primero destruir y luego con un arma especial del modo reconstruir para así tomarlo y hacerlo nuestra base. Este modo es especialmente frenético y sin un respiro, ya que en cualquier momento puede venir un oponente a destruir lo que nos costó tanto tomar, y se genera un ida y vuelta constante pero extremadamente divertido.
A todo esto, además se suma la capacidad de equipar a nuestro personaje con mochilas que tienen habilidades especiales como son la mochila que puede curarte como curar a tus compañeros, la mochila de infiltración la cual te vuelve invisible por un tiempo, la de propulsión la cual te deja volar por un corto periodo de tiempo, y la Rhino, con la cual podes atravesar paredes sin problemas y acercarte a un oponente que no sospecha nada.
Ttambién hay un modo multiplayer para los singleplayer llamado Wrecking Crew, el cual nos deja a nosotros y a cuatro amigos mas turnarnos para poder ver quien destruye mas estructuras en menos tiempo.

Todo el sistema multiplayer, gracias al la habilidad de destruir estructuras, genera unos encuentros más que interesantes y entretenidos, por sobre todo no hay mejor cosa que atravesar una pared con tu martillo y besarle la frente a un enemigo con el mismo.

Un incentivo para la revolución

El Red Faction Guerrilla viene también de la mano con DLCs, los cuales son contenidos que podemos bajar y que traen nuevas misiones. En el caso de la PC el juego trae ya consigo el DLC llamado Demons of the Badlands el cual trata de la historia de los Marauders y de uno en especial, el cual tiene una repercusión en la historia del juego en si. En Demons of the Badlands recorreremos una zona nueva y bastante mas pequeña que la del Guerrilla pero no así menos divertida, en esta zona llamada Mariner tendremos que pelear contra el EDF el cual trata de tomar control sobre este sector y deberemos pelear para que no lleguen a conseguirlo. El DLC juega de la misma manera que el Guerrilla en si desde las misiones extras, destruir estructuras del EDF, lo que cambia es el ambiente en donde es un valle prácticamente y por las paredes del mismo veremos casas y otras estructuras adosadas a las mismas. El unico problema de Demons of the Badlands es el Spoiler sobre la historia de los Marauders y sobre un personaje importante del juego, pero sigue siendo un hermoso extra del juego, además de agregar armas, vehículos y historia para este rico juego.

¡¡¡Viva la Revolución!!!

En si Red Faction Guerrilla sufre de varios problemas como una historia un poco pobre, misiones repetitivas y una dificultad que nos castiga varias veces hasta que nos sale bien. Pero la Guerrilla sobrevive, y mejor que nunca, gracias a un mundo en su totalidad lleno de detalles, campaña singleplayer bastante larga, armamento variado, vehículos muy bien logrados. Y por supuesto, un modo multiplayer soberbio y un sistema de físicas utilizado de una manera excelente para la destrucción de edificios, hacen que Red Faction Guerrilla pueda llegar a ser un juego de proporciones épicas y por supuesto todo gracias a nuestro mejor amigo el martillo de minería el arma más satisfactoria que hemos conocido.


Más información: www.alkon.com.ar.