El nuevo ministro de Ciencia y Tecnología brasilero es un astronauta

"Nuestra responsabilidad ante el ministerio es ayudar a construir un país mejor"

El ultraderechista Jair Bolsonaro asumió esta semana como presidente de Brasil, y junto con el 22 nuevos ministros, entre ellos el astronauta Marcos Pontes, Teniente coronel de la Fuerza Aérea y funcionario de la Agencia Espacial Brasileña.

Se trata del único brasileño que viajó al espacio. Fue en 2006, cuando integró una misión de la NASA a la Estación Espacial Internacional, a bordo de un Soyuz TMA-8.



El pasado miércoles Pontes asumió el cargo de ministro de Ciencia, Tecnología, Innovaciones y Comunicaciones y dio una directriz clara: a partir de ahora, la misión es hacer que la ciencia y la tecnología sean propulsoras de la mejora de la calidad de vida de la población y del desarrollo del país.



"Agradezco al presidente Jair Bolsonaro por haberme escalado a esta misión por el país. Recibimos una gran responsabilidad, que nos ha sido dada por millones de personas. Nuestra responsabilidad ante el ministerio es ayudar a construir un país mejor", dijo el flamante ministro en el acto.

"La tecnología es transversal, está en todas partes, está en la calidad de vida de las personas. Funciona como la punta de lanza del desarrollo, y nosotros somos los responsables de convertirla en una mejor herramienta para el éxito del país".

Durante una conferencia de prensa, el ministro evaluó que la expansión del acceso a Internet de banda ancha es uno de los grandes desafíos de su gestión. "Tenemos un país muy grande, con regiones remotas y que necesitan esta tecnología. Llevar banda ancha es importante para las escuelas, para las familias y para traer a la gente para el día actual, en términos de tecnología".

Puentes es el primer astronauta profesional que representa oficialmente a un país del hemisferio sur en el espacio. Participó en la Misión Centenario, en 2006, fruto de una asociación entre la Agencia Espacial Brasileña (AEB) y la Agencia Espacial Rusa (Roscosmos), trabajando por diez días en la Estación Espacial Internacional (ISS) como especialista de misión, responsable del mantenimiento de los sistemas de la nave espacial y por la ejecución de investigaciones científicas elegidas por la Academia Brasileña de Ciencias.