El Gobierno de Estados Unidos formalizó sus acusaciones contra Huawei

Se acusa a la empresa china de conspiración, fraude bancario y robo de secretos comerciales

Finalmente, lo que parecía una puja de rumores diplomáticos y especulación se confirmó. La justicia estadounidense inició acciones legales contra la compañía china Huawei.

Dos vías son las que estructuran la acusación: desde la corte del distrito en Brooklyn, Nueva York, el gobierno alega que Huawei, su directora financiera, Meng Wanzhou, y dos compañías afiliadas, están involucradas en fraude bancario y espionaje, así como en una conspiración en conexión a relaciones comerciales con Irán. Por su parte, desde Washington, D.C., se acusa a la compañía de robar secretos comerciales de la empresa T-Mobile USA Inc., al tiempo que ofrecía a sus empleados un bono para quienes recolectaran información tecnológica de empresas rivales.



Durante una conferencia de prensa en Washington, D.C., Christopher Wray, director del FBI, dijo que el caso "expone las acciones desvergonzadas y persistentes de Huawei para explotar las compañías americanas y las instituciones financieras, y así amenazar al libre y justo mercado global".

La compañía se expresó vía mail al sitio de Bloomberg: "Nuestra compañía denega que tanto ella como sus empresas subsidiarias o afiliadas hayan cometido ninguna de las violaciones a las leyes estadounidenses referidas en las acusaciones".

Por otra parte, respecto a la situación de Meng Wenzhou, hija del fundador de Huawei, Ren Zhenfei, expresaron que no les constaba que hubiese cometido ningún crimen. Meng Wenzhou, que había sido detenida en Canadá y liberada luego de pagar la fianza, enfrentaba una posible extradición. Ahora el gobierno canadiense recibió, finalmente, el pedido legal.

El gobierno chino, a su vez, manifestó su apoyo a la compañía y acusó a la justicia estadounidense de un intento de restringir el crecimiento de su industria tecnológica, al tiempo que exige la inmediata revocación del pedido de captura de Meng.