La industria no tiene excusas para innovar

Escribe Pablo Rodríguez, Head of Industry Latam, Baufest

"La innovación tiene el potencial de aumentar un 50% la productividad de la economía a largo plazo. Debemos trabajar juntos para que las reformas estructurales que estamos haciendo sean acompañadas por más innovación dentro de las empresas", afirmó el ministro de Producción y Trabajo de la Nación, el economista Dante Sica, el 13 de junio, en el tercer Foro Argentina Industrial, frente a más de 150 empresarios locales.

Según distintos estudios y análisis, desde la década del ‘70 hasta ahora, nuestro país tuvo una inversión en investigación y desarrollo (I+D) promedio de 0,4% con respecto al PBI, cuando en los países desarrollados ronda el 4%. En el caso particular de la industria manufacturera, mientras que a escala mundial aplican un 80% de su I+D, la Argentina sólo utiliza el 15% de este conocimiento en este sector. En el caso del uso de la tecnología, la firma de consultoría y análisis británica Ovum reveló que a escala mundial el segmento financiero es el que más invierte, seguido por el de manufactura. Los Estados Unidos y Europa son los que se llevan el mayor porcentaje de la torta. América del Sur, por su parte, queda relegada con un 2,8%.

Frente a este panorama, la tecnología se convirtió en uno de los principales aliados y, desde hace un tiempo, términos como “industrias 4.0” o “smart manufacturing” se instalaron en la discusión de las grandes empresas exportadoras locales. Los temas que se ponen sobre la mesa incluyen IoT (Internet of Things) y Edge Computing con sensores cada vez más avanzados para recolectar información y transformar los procesos industriales; Data y Advance Analytics, como fuente fundamental de la transformación digital que va desde entender mejor a sus clientes hasta mejorar el mantenimiento de las líneas de producción y mejorar la productividad; Design Thinking y Agile delivery, como metodologías base de cualquier programa de innovación; Machine Learning y Artificial Intelligence, para predecir comportamientos, identificar problemas de calidad en los productos y reducir costos de logística; Digital Twins para simular, acelerar proyectos, monitorear y mejorar diseños; y Blockchain, como método de reconciliación y verificación de procesos entre compañías.

La necesidad de contar con sistemas a la medida de sus clientes y la competencia global debería impulsar a las grandes empresas manufactureras argentinas a encarar procesos de innovación con estas tecnologías. Sin embargo, son pocas las organizaciones que han emprendido este camino y los casos se vuelven casi nulos en el segmento de las medianas empresas.

Frente a un contexto local difícil para las industrias que dependen mayoritariamente del consumo interno, la inversión en innovación digital parece un lujo. Sin embargo, la realidad muestra lo contrario: la innovación digital es imprescindible para reducir costos y lograr sustentabilidad y crecimiento en mercados en el mediano y largo plazo. Por ejemplo, el uso de Advance Analytics sobre los datos e información generada en las líneas de producción permite una reducción del 30% en los costos de mantenimiento y un aumento de la productividad significativa al evitar que las planta se detengan.

En la Argentina existe todo un ecosistema que está al servicio de la industria para sustentar esta transformación: empresas de conocimiento con experiencia en el uso de estas tecnologías que se encuentran a la vanguardia mundial; centros de investigación y aplicación de primera línea (INTI y Conicet, en el ámbito estatal; y CITES, en el privado, por mencionar algunos), gran capacidad de los recursos humanos apalancados en excelentes centros de formación universitaria y presencia de los principales proveedores tecnológicos globales.

Se acabaron los tiempos de excusas. Las empresas industriales argentinas tienen el desafío de dejar atrás las dinámicas propias del siglo XX y proyectarse hacia el futuro entendiendo que las tendencias globales tarde o temprano son determinantes para la sustentabilidad y el futuro del negocio.

(*) Pablo Rodríguez: Head of Industry Latam, Baufest