La hiperconvergencia llegó para quedarse

Escribe Pedro Sandalis, Regional Manager en América del Sur de Nutanix

Centros de datos internos, nubes públicas y privadas, instalaciones de backup en data centers de terceros, el interminable mundo de dispositivos remotos o asociados a internet de las cosa. La infraestructura tecnológica para la era digital es amplia y diversa.

En este sentido, el concepto de infraestructura de hiperconvergencia (HCI, por sus siglas en inglés: hyperconverged infraestructure) cobra un rol esencial: propone virtualizar y unificar en una misma capa de arquitectura de IT todos esos estratos de procesamiento, de forma tal que la entrega de datos y de aplicaciones sea inmediata y transparente para los usuarios, independientemente de dónde residan los sistemas. En líneas generales, HCI actúa en dos planos: el de datos distribuidos y el de gestión. El primero corre sobre un clúster de nodos que ofrecen almacenamiento, virtualización y servicios de red para aplicaciones tanto de máquinas virtuales como de contenedores. El segundo, propone una vista única de todos los recursos utilizados y elimina la necesidad de administrar distintos elementos de infraestructura de manera separada.

Así, se simplifican las operaciones de centro de datos y se obtienen innumerables beneficios adicionales, que van desde una mayor satisfacción y productividad por parte de los usuarios y los equipos de trabajo, que mejoran de manera drástica el acceso a las aplicaciones y a los datos, hasta una mayor capacidad de respuesta a los clientes, pasando, por supuesto, por mejores perspectivas para diseñar esquemas sólidos de seguridad de la información.

Pero las ventajas para las empresas que implementan el modelo de hiperconvergencia no se acaban allí: la integración de los procesos se vuelve más simple, lo que acelera la incorporación de nuevas aplicaciones y los problemas de compatibilidad entre servidores, sistemas de almacenamiento y dispositivos de redes tienden a desaparecer. En términos de costos, el software puede correr sobre cualquier hardware básico. Y desde el punto de vista de los esfuerzos de mantenimiento, se simplifica de manera notable la migración entre diferentes nubes y se dispone de diversas herramientas de gestión multicloud.

Según la consultora de mercado Gartner, quien colocó a Nutanix entre los líderes del mercado HCI en su Cuadrante Mágico de 2019, para el 2022 el 75 por ciento de los datos corporativos se crearán y procesarán fuera de las estructuras tradicionales del centro de datos o de la nube, una cifra significativamente mayor al 10 por ciento del 2018. Siguiendo esta línea podemos determinar que la tendencia es clara, la era de la hiperconexión necesita de una hiperconvergencia. Si bien el concepto es novedoso, se perfila como una oportunidad de cara a los próximos años ya que se presenta como una inversión a largo plazo que simplificará y efectivizará todos procesos de las compañías.

(*) Pedro Sandalis: Manager Regional para Latinoamérica Sur en Nutanix