La industria del entretenimiento necesita del público

Escribe Marina Cuello, Senior Android Developer en intive

Dos de las industrias que más sufren con el distanciamiento social son los espectáculos en vivo y el deporte profesional. Y esto va más allá del tendal económico, los puestos de trabajo en pausa o perdidos y los eventos programados con meses de anterioridad suspendidos «hasta nuevo aviso». Las personas protagonistas de estas industrias sufren también los cambios a un nivel más personal. Los artistas se ven limitados a conciertos «desde casa» o a eventos online, y cientos de deportistas que tienen la suerte de haber vuelto a sus campeonatos, lo hacen «a puertas cerradas».

No es extraño que artistas y deportistas hagan saber que, muchas veces, toman su fuerza psicológica y sus ganas de seguir adelante de su público: sus fans y sus hinchadas, las voces, los gritos y las caras emocionadas, son parte de lo que los hace sentir vivos. De la misma manera, esos fans extrañan la posibilidad de expresar a sus favoritos lo que sienten, cara a cara.

Dentro de las actividades que mencionamos, hay dos casos en los que la ausencia del público se hizo sentir mucho más: la NBA y el kpop. En el basket de la NBA, la figura del «courtside», que corresponde a los asientos más cercanos a la cancha, es parte de la cultura del deporte. Las interacciones entre los jugadores y el equipo técnico y los miembros de esa sección de la audiencia son una parte fundamental del gran espectáculo. El kpop, por su parte, es un fenómeno bastante extraño. Se trata de una etiqueta creada por el mundo occidental, que tiene distintos significados dependiendo de quién la utilice, pero gira alrededor de la música pop producida en Corea del Sur.

Pero tanto para el kpop como para la NBA, la tecnología se convirtió en un aliado clave que le aporta soluciones que, aunque aún no llegan a reemplazar un estadio o una arena llenos de fans, les permiten a jugadores y artistas tener a su lado un poco del calor del público, aunque sea desde una pantalla LED y un sistema de audio.

La tecnología, salvando las distancias


La NBA creó un sistema de «fans virtuales». Dependiendo de lo que pueda implementar cada equipo (no todos tienen el mismo presupuesto, ni tampoco sus fans), este sistema ofrece varias posibilidades. Lo que todos tienen en común es que quienes logran acceso a la categoría de «fans virtuales», reciben, al anotarse o al comprar su ticket, un usuario y contraseña únicos, que les permiten ingresar a Microsoft Teams y acceder a un calendario con los eventos disponibles. En el caso más básico, los fanáticos pueden sentirse «parte de un todo» accediendo a una reunión virtual establecida con el nuevo «together mode», que permite simular la presencia de todos los fans en un solo lugar. Otro caso puede ser que esa misma «hinchada virtual», o al menos una parte de ella, sea mostrada a los jugadores en una pantalla gigante, ubicada donde hubieran estado los asientos durante un partido «presencial». Y en otros casos, incluso, cada fanático es mostrado en una pantalla LED independiente.

Para el kpop también hay varias soluciones: los “virtual fansigns”. Los fans compran por adelantado un ítem en las tiendas oficiales (un álbum, o ciertas piezas de merchandising) y, ya sea por medio de un sorteo, un concurso, o pagando un extra, tienen acceso a estos eventos por medio de plataformas normales de videochat o sitios especializados. Los artistas se ubican frente a tablets o computadoras y firman los álbums y responden a peticiones, como decir alguna frase o hacer una pose para los fans. Luego, quienes adquirieron algún producto, lo reciben por correo, con firma y todo. Otros eventos de contacto con «meet & greets» son similares a una fansign pero sin merchandising en el medio. Por su lado, los «hi touch» son eventos muy propios del kpop en el que los artistas se ubican en línea, y los fans se encuentran con ellos por segundos, recibiendo un apretón de manos. En la versión virtual, los fans se conectan y tienen cortísimas videollamadas con cada miembro de su banda favorita, o solo con aquellos que hayan elegido.

Es así como el «streaming inverso», reuniones virtuales o simples apps de videochat se convirtieron en las soluciones que la tecnología presta al mundo del espectáculo en esta «nueva normalidad», para que el público pueda salir de atrás de la pantalla y llegar a los protagonistas.

(*) Marina Cuello: Senior Android Developer en intive