Un ingeniero alemán descifró el código de seguridad de los teléfonos celulares

Karsten Nohl puso en jaque a la industria móvil, al descubrir cómo funciona el sistema GSM, que encripta el 80% de las llamadas que se realizan desde cualquier equipo. Su intención era mostrar cuán débil son las comunicaciones de este tipo

El nombre de Karsten Nohl ocupa el centro de todas las miradas de la industria de la telefonía móvil, ya que ese ingeniero alemán de 28 años descifró el código de seguridad del sistema GSM, que encripta el 80% de las llamadas que se hacen desde cualquier teléfono celular del mundo. Los principales jugadores del sector denunciarion que fue una acción ilegal que puso a toda la red de comunicaciones móviles a merced de cualquier organización criminal.

Durante el Chaos Communication Congress, una conferencia para hackers que se celebró en la ciudad de Berlín, Nohl afirmó que gracias a la acción que llevó a cabo dejó en evidencia que el estándar GSM es “inadecuado”, y que las operadoras deben adoptar mejores medidas de seguridad.

La industria no se quedó de brazos cruzados mientras el ingeniero germano celebraba su “victoria”. La agencia de noticias EFE informó que la Asociación GSM, el consorcio de la industria que escribió el código de cifrado, manifestó que el trabajo de Nohl fue ilegal y que puso en peligro a toda la red de comunicación móvil.

No obstante, el hacker sostuvo al diario The New York Times que antes de dar cualquier paso tomó todas las precauciones jurídicas necesarias, enfatizando que el crackeo del sistema tuvo fines académicos, y que en ningún momento trató de interceptar ninguna llamada.

Palabras cruzadas

A través de un comunicado con el que trató de bajar un poco el tono alarmista incial con el que reaccionó, la Asociación GSM afirmó que cualquier operadora, con una simple modificación del código, puede evitar cualquier intento ilegal de escucha. Además, desestimó que el público pueda acceder al software y hardware necesario para llevar a cabo una acción de ese tipo.

Sin embargo Simon Bransfield-Garth, jefe de seguridad de Cellcrypt, una compañía británica desarrolladora de programas, no estuvo muy de acuerdo con esa postura. Estimó que Nohl puso “la sofisticada tecnología para interceptar llamadas, tan sólo en manos de los gobiernos y agencias de inteligencia, al alcance de cualquier organización criminal bien financiada".